A la movilización de estudiantes, como parte del show llamado "estallido social" —que preparó la actual coalición en el gobierno cuando fue oposición al anterior—, se le dio una agenda que fue cambiando con el tiempo. Los agitadores del castrismo habían partido con la "educación como un derecho", slogan pergeñado por el departamento de propaganda para acorralar a Piñera que tontamente la había declarado "un bien de consumo".
Visto que Piñera le atracó un fosforito a sus conceptos previos y se avino a generosos planes de financiamiento de la educación superior (la educación escolar ha sido siempre gratuita), a eso añadieron exigencias de calidad, quedando el slogan como como "derecho a una educación gratuita y de calidad".
Pero esto de la calidad resultó contraproducente porque chocaba con la verdadera agenda de los titiriteros que manejaban el "movimiento". Todo Chile sabe que el foco de la mala calidad en la educación escolar está en las escuelas con profesores controlados por el Mineduc, las mal llamadas "municipalizadas", insistir en lo de la calidad estaba arriesgando el tinglado que la UP/DC armó en 1991 para tomar el control político del gremio docente estatal.
Por lo tanto y por consiguiente, las banderas de calidad quedaron tiradas en el camino y el tal "movimiento" se redujo a la agitación y la violencia despojadas de discurso inteligible. Lo que no fue óbice para que el gobierno del demagogo Piñera considerara a sus agitadores visibles como líderes de un movimiento "grande, noble, hermoso" y, en la práctica, les allanara el camino al Congreso de la República.
Así las cosas, con el retorno de los malos, esta vez con una combinación de poder institucional jamás antes visto en Chile, quedó abierta de par en par la puerta para la irrupción de las consignas del "movimiento" transformadas en objetivos concretos de delirantes reformas lideradas esta vez por el mismísimo gobierno.
Y esa es la génesis que "explica" el festival de chapucerías en que se ha transformado el programa de reforma educacional: "bajar de los patines" a los que van más rápido, amenazar con las penas del infierno a quienes ganen dinero con establecimientos independientes, desechar el juicio de las familias en la elección de escuelas, defender el sistema escolar controlado por el gobierno como el único que ofrece diversidad, desacreditar la capacidad de administración de los municipios y, entre otras muchas insensateces, presentar al sistema de escuelas independientes como un gigantesco fracaso de gestión.
En esto último, el ministro Eyzaguirre dio a conocer con gran bombo que en 15 años 270 mil alumnos habían perdido su escuela independiente y habían tenido que buscar donde reubicarse porque "casi 3 mil colegios habían cerrado". Esta "bomba", que tiró cuando fue interpelado hace una semana en la cámara de diputados, se basa en un estudio hecho por un estudiante de economía de la Universidad de Chile y respaldado por la firma de tres profesores zurdos de esa facultad.
Pero la tal bomba resultó ser otra chapucería porque la fuente de los datos del estudiante es un listado de roles de escuelas (cada escuela tiene un rol único) cuya variación obedeció más a un cambio de rol que en la desaparición de la escuela y la fundación de otra nueva, que era la denuncia de Eyzaguirre. Estos cambios de roles aplican cuando la escuela cambia de régimen (pre-escolar, básico, medio, técnico, de jornada completa, etc.).
En resumen, este es definitivamente un gobierno chapucero. Y los "argumentos" que se blanden en otras áreas que busca refundar son tan chapuceros como estos en educación.
¿Cómo se explica que la gestión del gobierno haya caído a estos niveles de chapucería?
Yo creo que es por una anomalía histórica. Luego de 20 años de gobierno en que se vistió con plumas ajenas, se gastó cantidades siderales de dinero en instalar su propio relato y aprovechó los frutos del modelo en su propio beneficio, esta coalición jamás debió volver al poder.
Y te tengo pésimas noticias. Aunque haya un cambio de gobierno, los gravísimos errores que dieron origen a esta anomalía y que ya los conocemos, podrían seguir cometiéndose con efectos devastadores para el país.
A propósito de lo mismo, en uno de esos debate que hay, creo, que en CNN Chile, donde tenía que estar Mayol, el panelista que estaba al lado de él, cuyo nombre no recuerdo, dijo que durante la Concertación animaron a que se crearan colegios particulares subvencionados. Y ahora, la Nueva Mayoría o ex Concertación más el PC dice lo contrario. O sea, son esquizofrénicos.
ResponderEliminarAdemás dijo que la mayoría de los sostendores pertenecen a la ex Concertación.
Eyzaguirre es alumno de Saint George. No le pidas tanto.
Cierto, hoy el diario reporta que el sindicato de profesores estatales (llamado "Colegio" por ellos) tiene un patrimonio multimillonario que incluye escuelas particulares subvencionadas.
EliminarEs realmente de locos.