Sin embargo, avanzando en los años 60 se hizo visible el incremento de la penetración socialista en la educación. Por esos años se inauguraron las "tomas" de liceos y otros recintos educacionales donde hacían su agosto los profesores que azuzaban la apropiación de viviendas, de industrias y de predios agrícolas. Al mismo tiempo, del Saint George, del Verbo Divino y de otras escuelas privadas salía gente como Pascal Allende, Insulza y muchos que más tarde apurarían la caída de Chile en el despeñadero que fue la dictadura castrista de Allende.
Para entonces, la zurdería ya controlaba casi todo el Ministerio de Educación (situación que en buena medida se mantiene hasta el presente), las Escuelas Normales (formadoras de profesores) y el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile (única institución alternativa a las Escuelas Normales, conocida por todos los santiaguinos como "el piedragógico", nido de activismo violentista de izquierda).
Luego de la expulsión de la dictadura castrista, el Gobierno Militar debió enfrentar esta situación como la de un médico frente a la gangrena. Se pasó legislación restituyendo el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos, se cerraron las escuelas normales y se intentó retomar el talante educacional (y no de adoctrinamiento marxista) del "piedragógico" por la vía de darle una institucionalidad propia, dentro de un cuadro general de liberalización de la educación, que le sacó el candado al monopolio de la educación superior que tenían las universidades "tradicionales" (también en proceso de gangrenamiento zurdo). A finales de su período, el Gobierno Militar dejó pasar la descentralización de escuelas (o "municipalización"), en línea con la visión libertaria.
Junto con la promoción de la educación preescolar (hasta entonces casi inexistente), las escuelas públicas emancipadas del ministerio empezaron a funcionar bastante bien y su nueva gestión formó parte del renacimiento de la educación en Chile, que traería un incremento espectacular en la cantidad de jóvenes dentro del sistema escolar y de educación superior.
Luego de la expulsión de la dictadura castrista, el Gobierno Militar debió enfrentar esta situación como la de un médico frente a la gangrena. Se pasó legislación restituyendo el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos, se cerraron las escuelas normales y se intentó retomar el talante educacional (y no de adoctrinamiento marxista) del "piedragógico" por la vía de darle una institucionalidad propia, dentro de un cuadro general de liberalización de la educación, que le sacó el candado al monopolio de la educación superior que tenían las universidades "tradicionales" (también en proceso de gangrenamiento zurdo). A finales de su período, el Gobierno Militar dejó pasar la descentralización de escuelas (o "municipalización"), en línea con la visión libertaria.
Junto con la promoción de la educación preescolar (hasta entonces casi inexistente), las escuelas públicas emancipadas del ministerio empezaron a funcionar bastante bien y su nueva gestión formó parte del renacimiento de la educación en Chile, que traería un incremento espectacular en la cantidad de jóvenes dentro del sistema escolar y de educación superior.
La vuelta del populismo progresista de la UP/DC (bajo la chapa "concertación por la Democracia" que escondía la pertenencia del PC en el grupo) en 1990, gatilló contramedidas inmediatas, orientadas a torpedear la descentralización y a recuperar para el gobierno el control de los profesores, los contenidos y hasta los textos "oficiales", mediante el infame Estatuto Docente (impuesto en 1991), que arrebató a los municipios el derecho a administrar sus profesores, sus planes y material de estudio.
El Estatuto Docente garantiza a los profesores una renta creciente a todo evento con independencia absoluta de la calidad de su desempeño, sólo a cambio de reconocer el liderazgo gremial centralizado políticamente (primero por la DC, luego por el PC).
Obviamente, en poco tiempo reaparecieron los nocivos efectos del modelo centralizador y estatista.
Librados de toda responsabilidad profesional, muchos profesores dejaron de asistir puntual y rutinariamente a clases (la cantidad de licencias médicas se disparó a niveles increíbles), descuidaron la obligación de esforzarse en la creatividad y constancia de su trabajo (que antes era toda una vocación) y hasta perdieron el respeto de los niños que presenciaron incontables casos de faltas a la moral.
Esta situación disparó la demanda de alternativas privadas y de escuelas particulares subvencionadas, es decir, pagadas con fondos públicos pero libres del Estatuto Docente. En 20 años, más de medio millón de alumnos ha migrado de las escuelas sometidas al Estatuto a las subvencionadas.
Lejos de morigerar el efecto del Estatuto Docente el régimen anterior bloqueó la autorización para el funcionamiento de nuevas escuelas particulares subvencionadas, salvo las que eran iniciativa de gente de izquierda, condenando a cientos de miles de niños a permanecer en el sistema controlado por el régimen y, con ello, a egresar del sistema como "analfabetos funcionales": chicos que pueden recitar de corrido el catecismo zurdo, pero que tienen serias dificultades a la hora de explicar un texto leído mecánicamente.
La pérdida de la Presidencia por parte de la izquierda en el 2010 pareció dejar el campo libre para que el nuevo gobierno corrigiera los vicios y gravísimos defectos del sistema, pero la coalición que dejó el poder y pasó a la oposición (que mantiene intacto su control de buena parte del aparato administrativo y sus vinculaciones con el castrismo y el progresismo internacional) ha estado dificultando cada paso del actual gobierno para impedir que la educación retome el camino abortado por ellos.
Con ese fin han organizado grandes y violentas manifestaciones callejeras, restaurando las tomas de escuelas y reclamando por la pésima calidad de la educación, cuidándose por supuesto de aparecer en primera fila por la obvia responsabilidad que les cabe. Y el efecto de más de un año de esta acometida ha sido aún más devastador para la educación estatal, ocasionando una verdadera estampida desde las escuelas sometidas al Estatuto Docente hacia las particulares subvencionadas que esta vez no ha sido frenada por el gobierno.
Y hoy, frente a las iniciativas del actual gobierno para recuperar los niveles de calidad perdidos que no se ajustan a las exigencias izquierdistas y defiende el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos, la oposición ha montado toda una red de orgánicas y publicaciones para instalar la idea de que esta administración busca consolidar un "apartheid" educacional, promoviendo una versión amañada de la historia que aquí he descrito.
Finalmente ha quedado al descubierto el objetivo real de la zurdería: el control estatal de las escuelas, los profesores y los contenidos. Ya quedaron tiradas las banderas de "calidad" y "equidad", porque el gobierno ha respondido con una gestión y una batería de iniciativas que apuntan a resolver esos problemas.
Y creo que aplicando una visión "de derecha" el gobierno no sólo atina a lo que es correcto hacer sino que recuperará posiciones en las encuestas.
El objetivo de este artículo es darle una oportunidad a la verdad y apoyar el proyecto del actual gobierno. Tengo ideas para sugerir medidas y políticas. Pero por ahora afirmo que intentar revivir el cadáver de la educación centralizada en el gobierno sólo es funcional a los intereses del totalitarismo, siempre necesitado de tomar la manija del flujo de las ideas y de la información.
Los padres nos preocupamos por nuestros hijos, pero no somos imbéciles. Si la educación pública recuperara los estándares del pasado ella se constituiría en una alternativa para muchos. Pero la recuperación de esos estándares no es cosa del gobierno, cuya intervención se ha notado sólo al bajarlos. Somos nosotros mismos y nuestras comunidades los que podemos hacerlo. Simplemente devuélvanos la libertad de crear y administrar nuestras escuelas públicas. Saquen de ahí las manos los planificadores y funcionarios políticos, que ya han hecho demasiado daño.
Ciro
ResponderEliminarEn la época en que existían las Escuelas Normales, la Universidad de Chile no era la única alternativa de formación pedagógica.
En general, en esos años, se formaban Profesores de E Básica en las E. Normales y de E. Media en las Universidades.
Después del cierre de las E. Normales se masificó la oferta de enseñanza básica en las ues de la época; ingresando a ese nivel de formación los estudiantes con más bajos puntajes en la PAA, que no podían ingresar a otras carreras universitarias.
El modelo de enseñanza replicaba -erróneamente- el criterio que respaldaba que bastaba lo que "sabían" de sus estudios de E Media para poder enseñar a los niños de 1º a 8º año básico.
Ese punto de vista equívoco, centraba los planes de estudio -como ocurre hasta el día de hoy- en enseñar métodos de enseñanza (eso puede ser válido cuando uno tiene dominio de lo que debe enseñar e inválido cuando no lo tiene, como ya ocurría en esa época debido al impacto negativo que produjo en los niveles de aprendizaje la reforma del sistema de formación escolar promulgada por Frei (el muerto) durante su gobierno. Cuestión que se agrava cuando, además, en enseñanza básica el docente debe enfrentar la instrucción de varias materias, sucesivamente, en cada nivel de formación, hasta 4º año básico.
Afortunadamente, en esos años aún existían reglamentos de eliminación en las ues, y la presión para mantener a los estudiantes que no aprendían era mínima comparada con la presión que existe en la actualidad para hacerlo. La contraparte de esa situación era la falta de formación de muchos de los docentes -ex normalistas- que ingresan a las ues tradicionales después del cierre de las normales y prolongan, con su presencia y falta de visión, un paradigma de formación absolutamente obsoleto hasta el día de hoy. Paradigma avalado por la incompetencia histórica del ministerio de educación de ayer y de hoy.
Finalmente, estimo que la reforma tributaria propuesta por este gobierno es solo eso, una reforma sin garantía que, a partir de ella, se incremente la calidad de los niveles formativos a nivel escolar; y, si no se incrementa la calidad tampoco se mejora la equidad del servicio prestado.
Estoy de acuerdo en que la formación de profesores de básica fue mal impartida por las Ues (la Chile y la UC, principalmente).
EliminarPero el Estatuto Docente agravó el panorama en todos los ciclos escolares, desde básica hasta media.
Los mejores profesores de Básica que he conocido trabajan TODOS en escuelas particulares subvencionadas. El ambiente en las desmunicipalizadas es ominosamente negativo para esos profesionales.
La Carrera de E. Básica es mal impatrida por todas las ues que han ofrecido y hoy ofrecen esa carrera y, además, en la actualidad es pésimamente impartida por los institutos que también la tienen.
EliminarLa causa basal son las políticas de gobierno al respecto y el MINEDUC -brazo ejecutor de esas políticas, que genera planes y programas que son la base para que esas ues e ints. hagan mal su trabajo ya que esas instituciones forman el producto que el Mineduc les pide que formen. Producto que sale fallado en cerca del 99% de los casos.
Con esa plataforma política y ejecutiva, es muy difícil alcanzar calidad en la formación escolar, especialmente cuando uno de los insumos necesarios para generar aprendizaje en los estudiantes es basura, profesionalmente hablando.
Los resultados de la prueba Inicia 2011 que acaban de conocerse reafirman lo dicho.
El Estatuto Docente es "moco de pavo" como dicen en el campo, discutir sobre él es mantener distante el problema principal: El Mineduc y su parálisis paradigmática, a la que sumó un ministro mentiroso.
No comparto que el Estatuto Docente sea "moco de pavo" ni el ministro un mentiroso. Hay muchos profesores con la misma formación pero con desempeño absolutamente contrario, dependiendo del ambiente en el que les toca trabajar. El mero anuncio del ministro Lavín de apretar tuercas fue suficiente para que los profesores sometidos a ese Estatuto mejoraran su rendimiento y el Simce saltara 8 puntos en menos de un año. El ministro Beyer es una persona íntegra e ilustrada en el tema educacional. Descalificarlo como mentiroso lo descalifica a Ud. amigo "Gestión Educativa"
EliminarEl actual Ministro es un mentiroso,que se ampara en su supuesta experticia en el área. El es un I. Comercial Doctorado en Economía. No es un experto en educación. Sí es un lector de papers, cuyos resultados combina según la ocasión. Eso no lo hace experto; sin embargo, en un país como Chile puede pasar cualquier cosa.
ResponderEliminarEl estatuto docente es realmente una cuestión irrelevante; pero, que tiene la virtud de evitar que el tema central del sistema escolar, su falta de calidad, no se trate como es debido.
El resultaso del Simce es una de las mentiras de Beyer. La subida anunciada por él es falsa. Usted la cree porque la dijo una persona que se supone experta en el área. Pero la afirmación es falsa, errónea, equívoca. Los resultados siguen siendo igual de malos. Malos como siempre lo han sido.
A Fujimori (1991) también le creyeron los peruanos, como usted y otros chilenos le creen a HB, cuando comió cebiche en un espacio de TV, para desvirtuar la epidemia de cólera que afectaba a la población peruana.
Resultado, la gente volvió a comer cebiche y murieron más de 1000 personas en el nuevo salto que produjo la infección po elk vibrio cholerae.
Lo que la gente no sabía es que el cebiche que comió Fujimori fue preparado con peces de alta mar, no infectados como los costeros que recibían la infección de los desechos orgánicos vertidos al mar y que eran los de consumo popular.
Lo invito a revisar algunas de las entradas de mi blog y, tal vez, convenga conmigo, que el ministro es un verdadero Gato con Botas. http://autoestimaescolar.blogspot.com
La frase 2, dice ... del sistema escolar, su falta de calidad, no se trate como es debido
ResponderEliminarDebió decir. ... del sistema escolar, su falta de calidad, se trate como es debido.
El pérrafo 5, al final dice; ... que produjo la infección po elk vibrio cholerae.
debe decir ... que produjo la infección por el vibrio cholerae.
no he revisado todos los comentarios, pero me parece que una cuestion no mencionada es porque la "zurderia" hegemonizo. una de las respuestas posibles, es que la derecha economica en desmedro de la derecha politica, asi lo quiso o permitio.
ResponderEliminarno he revisado todos los comentarios, pero me parece que una cuestion no mencionada es porque la "zurderia" hegemonizo. una de las respuestas posibles, es que la derecha economica en desmedro de la derecha politica, asi lo quiso o permitio.
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