lunes, 23 de marzo de 2015

El poder exacerbado lleva al colapso

Siguiendo la lógica del sofisma, el recurso de levantar una imagen excepcional de la persona que les representa, es lo típico de la zurdería en todo el mundo. El socialismo no resiste la discusión ilustrada, por lo que no queda otra que proponer la entrega incondicional a las visiones del líder a quien se le asignan atributos sobrehumanos.

Por ello, desde los tiempos de Lenin, pasando por Mussolini, Hitler, hasta hoy en América, los zurdos* tienden a aglutinarse férreamente en torno a  su líder para quien siempre hay una corte de "intelectuales" que les vocean todas las virtudes de este mundo y del otro. Esta misma receta se ha aplicado con Castro por más de cincuenta años y se sigue repitiendo tal cual con Chávez, Dilma Rousseff, Correa, Ortega, Evo Morales, Kirchner, Bachelet e incluso Obama.

Pero, por mucho que se meta dinero en este empeño y se persiga a quienes puedan disentir, el proceso siempre tiene un final... y normalmente un mal final.

Los Castro han llegado al demoníaco intríngulis en que simplemente no pueden dejar el poder sin que ellos Y SUS FAMILIAS arriesguen seriamente la vida y las fortunas acumuladas. Lo mismo puede decirse del chavismo, del kirchnerismo y de otros que han traspasado el umbral que permite dejar el poder y volverse tranquilamente a casa.

Y, aunque parecieran no haber traspasado esa línea, para Correa, Morales y Ortega no será nada trivial dejar el poder así como así.

De lejos, pareciera que todavía Bachelet no ha llegado a ese punto, pero si miramos la extensión a la que ha llegado el poder de la banda que está detrás de ella y la magnitud del poder que presionan por alcanzar, nos estamos aproximando al punto en que la UP/DC "no podrá" dejar el poder sin que quede la tendalada.

Vean, por ejemplo, lo que pasa en la administración de justicia. Siendo claro el objetivo de traspasar a la derecha el baldón de corruptos con que popularmente son conocidos, los UP/DC han desatado una caza de brujas de tal virulencia que se ha violentado de un modo inédito el funcionamiento normal de la administración del estado. La autoridad de impuestos haciendo contorsiones increíbles para mantener los fuegos sobre la derecha y eludir que la metralla dañe a "los nuestros". La fiscalía en el mismo ejercicio mientras las demás instituciones han dejado de saber cuándo actuar o cuándo abrir la boca.

Y frente a la arremetida por incrementar hasta donde se pueda el espacio bajo dominio de los que están en el poder, ni hablar de lo que ocurre en el funcionamiento de los programas de educación, salud, en la actividad al interior de las empresas, en la actividad productiva y de construcción, en la minería, en la inversión.

Si la UP/DC con Bachelet presentada como la madre de la patria logran sólo la mitad de los objetivos que se han propuesto, su salida del gobierno obligará al nuevo a enfrentar el desmontaje total de lo que han hecho, lo que servirá a la UP/DC para organizar nuevos "estallidos sociales" reclamando que se mantengan y entrando con ello en una espiral inacabable de tensiones que en poco tiempo nos llevarán de vuelta a las cavernas.

Piñera sacó mal sus cuentas al instalar a la UP/DC, como lo hizo la DC en 1970 cuando instaló a la UP. Eso mejora las expectativas de recuperar el poder en la próxima pasada, pero debilita que la próxima pasada siquiera exista.

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* Hace varios años empecé a usar este adjetivo para agrupar en él a las diferentes "sensibilidades", "matices" o cambiantes chapas que usan los que pululan buscando tomar el control de la sociedad.

4 comentarios:

  1. Bachelet es un desastre. Su simpatía es una fachada.
    El actual gobierno rechazo las medidas de Estados Unidos contra Venezuela. Quizás pronto encontraremos terroristas del Hezbolá en Chile, entre otras cosas.

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    1. Un Chile normal y en progreso no es lo indicado para la supervivencia de la UP/DC. Por eso nos están haciendo mierda.

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  2. pero nos están haciendo mierda PORQUE NOSOTROS LO PERMITIMOS. ¿hasta cuando mierda seguimos colocando la otra mejilla?

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    1. Está visto que los políticos de la derecha no son enemigos para los UP/DC. Se los comen por las patas.

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