lunes, 25 de abril de 2011

Ricardo "Chauncey" Lagos

Leí las propuestas de Lagos para el 2030 (!) con las que busca reponerse hoy en la liga de los presidenciables.

En el documento recurre al viejo truco de partir de premisas falsas: que "ahora sí" es tiempo de pensar en achicar la brecha entre ricos y pobres —como si antes eso hubiera sido impensable— y que fue el régimen concertacionista el que impulsó a Chile al desarrollo, como si ellos hubieran diseñado e implementado el modelo que nos permitirá alcanzar ese nivel.

Creyéndonos capaces de deglutir estas falacias, Lagos replantea que el gobierno administre una enorme bolsa, aumentada por una gran alza de impuestos, para repartir "bienestar" a la nación.

La verdad es que, habiendo multiplicado SIETE VECES el presupuesto, la coalición de Lagos redujo TODOS LOS AÑOS nuestra tasa de crecimiento, hasta llegar bajo Bachelet a su peor nivel en 20 años, sin disminuir un ápice la brecha entre ricos y pobres y, peor todavía, creando una enorme cantidad de nuevos pobres.

Es decir, Lagos se candidatea para repetir el mismísimo numerito por el que les sacamos del ejecutivo.

Que el culpable del Transantiago, de la explosión corruptiva en el manejo de los bienes públicos y de la debacle educacional del sector "municipalizado" (columna publicada) se crea capaz de parir un documento que determine el rumbo futuro de la nación, convocando a "todos los sectores" para que le enriquezcan sus genialidades, es un absurdo que en el caso de Ricardo Lagos Escobar no me sorprende.

Esta persona nunca ha tenido más agudeza que la que desnuda esta trastada. Es cosa nada más de mirar hacia atrás desde ahora que sale con este "road map" para Chile, cansado quizás de servir la gentil designación de su hermano masón Ban Ki-Moon.
Entonces, entusiasmado al asumir como "Capitán Planeta" de la ONU, Lagos declaró pomposamente "la gente no vota por lo que se hizo en el pasado sino por lo que vas a hacer en el futuro", como declararía un super héroe justo antes de salir disparado por la ventana a salvar al mundo.

Poco antes ya había dejado sus buenas tendaladas con declaraciones en contra de Michelle Bachelet, culpándola de "errores en la implementación" del Transantiago (seguro, exceptuando las medidas castristas de Allende, la peor iniciativa pública de nuestra historia).
Adentrándose el gobierno de Bachelet, reventó el escándalo de las irregularidades en el ministerio de educación, Lagos ensayó el acto de Mr. Magoo y apareció declarando "no veo ninguna irregularidad", asumiendo la peregrina postura de que si él no las veía desaparecerían del interés de la opinión pública.
Y cuando el asunto ya era imparable, presionó para que Yasna Provoste actuara como "fusible" en la investigación por escándalos generados en su administración, transformando a la administración de Bachelet en la primera, desde la vigencia de la Constitución de 1980, en la que un ministro era destituido por acusación constitucional.

Ya en el propio gobierno de Lagos, de no haber sido por el impensado apoyo del líder de la entonces oposición y hoy gobierno, Pablo Longueira, esa administración no podría haber avanzado un paso sin haber inaugurado la temporada de acusaciones constitucionales que incluso le comprometían personalmente.

De seguro, Lagos está convencido de que Longueira fue víctima de su destreza en el manejo de los asuntos públicos o de su superioridad intelectual, cuestión que por algún tiempo compartió el columnista de izquierda de El Mercurio, Carlos Peña (que más tarde corrigió sus impresiones previas, motivado, quizás, por "perlas" como las siguientes).

Visitando San Petersburgo, emocionado de conocer las oficinas de Lenin, Lagos se despachó una declaración de antología (cito de memoria) "de no haber sido por Lenin no existiría un Gorbachov", que es como decir  "de no haberte rebanado la yugular, no habrías conocido al doctor que te la ha podido, más o menos, parchar".

O esa otra en que a la pregunta de SS Juan Pablo II ¿desde cuándo se escribe historia de Chile? respondió "desde 1810".

Recuerdo que a días de asumir el gobierno, mientras regaba el pasto, ví pasar el Lincoln Town Car de la Presidencia con las cortinas descorridas y la luz interior encendida mostrando a Lagos repasando una carpeta. Un desfile para la foto, sin duda, show que más tarde se vio reforzado con las "fiestas populares" que se organizó anualmente en el Parque Forestal, para eterno resquemor de los ofendidos y dañados vecinos de ese barrio.

Ya quedó dicho, la pasada de Lagos por el ministerio de Educación, bajo Aylwin, y el de Obras Públicas, bajo Frei, fue realmente desastrosa por la enorme cantidad de dinero dilapidado (y malversado), aunque el sujeto afirma que el sistema de concesiones es un gran logro de la república, cuestión que todavía espera ser revisada como corresponde, porque el precio que hemos pagado y seguimos pagando por esos "logros" todavía no ha sido debidamente auditado.

Seguramente buscando reponer un líder socialista, luego del descrédito de Allende, la biografía de Ricardo Lagos que publica Wikipedia es un panegírico preparado por sus parciales.

En ella, alterando fechas y cargos, se presentan aspectos de su trayectoria de modo que apunten a perfilarlo como un gran estadista: "comienza a desempeñarse como profesor de economía en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile..." después de haber estado hasta 1969 en el Instituto de Economía que dirigía el DC Carlos Massad, pero muchos le vieron esa Escuela varios años antes y al menos hasta 1966 vistiendo trajes cruzados "Príncipe de Gales" y zapatos italianos haciendo las mismas clases que dictaba Alberto Baltra, su ex profesor y mentor

Hay otras fechas hiper raras en Wikipedia, como que inició su postgrado en Duke el mismo año en que terminó Derecho y al siguiente se habría transformado en el PhD en Economía más "mármicoc" [de cocimiento rápido] y menos prolífico de la historia (salvo su tesis para el grado de licenciado en derecho, no conozco ninguna obra de Economía compuesta por el personaje).

En este punto, quizá valga la pena contarles de esa tesis.

Hijo único de madre viuda de clase media, el estudiante Lagos fue siempre un callado y solitario alumno que no tuvo oportunidad de sobresalir hasta que se transformó en discípulo favorito de Alberto Baltra, abogado y profesor de Economía Política en la Escuela de Derecho de la Chile.

Baltra, radical, masón y de tendencias socialistoides, era una excepción entre los conspicuos profesores de esa Facultad, casi todos católicos, conservadores y de familia "antigua". Pero este alumno Lagos se transformó en su más rendido admirador, en su ayudante de cátedra, en correligionario radical y en hermano masón.

Baltra retribuyó esta fidelidad vinculándolo a elementos políticos afines, en promoverlo como alumno destacado y hasta en calificar como sobresaliente su tesis de grado, un completo esperpento de Economía donde se concluye que "La única y verdadera solución es, entonces, la abolición de la propiedad privada de los medios de producción, los cuales deben pasar al Estado." [fuente]

Con todo, el partido radical y el profesor Baltra se las arreglaron para que hiciera un postgrado en la Universidad de Duke. Quienes allí le vieron en esas temporadas se admiraban, hace pocos años, que alguien tan apagado y poco notable llegase a Presidente de Chile.

Por entonces, nadie que no tuviera una larga y probada trayectoria profesional y académica llegaba a sentar plaza de catedrático. Por las mismas razones, nadie que no tuviera trayectoria similar podía instalarse de Secretario General de la Universidad. Y, siguiendo esa línea, nadie accedía a una embajada importante sin ser un "macuco" de las relaciones internacionales.

Lagos ocupó esos tres puestos sin tener trayectoria ni profesional ni académica que hablara por él. Es decir, desde que Lagos se vinculó a Baltra fue siempre un APITUTADO. Así, tal cual, todo en mayúsculas.

Lo de la embajada, eso sí, le duró la nada misma porque el Congreso no cursó su nombramiento a tiempo y se vino la expulsión del castrismo que cortó de cuajo su escalada pitutera.

En mi opinión, ha habido muchos apitutados radicales y democristianos de perfil similar al de Lagos, pero ninguno de ellos ha superado su técnica para adoptar un aire doctoral apoyado en la impostación de la voz en tono grave y circunspecto. Eso es lo que llamo el atributo "pomadero" de Lagos, que proyecta una imagen visual y sonora como la de alguien sabio y con autoridad.
 
Pero eso es todo. Lagos carece absolutamente de capacidad para hilvanar discusiones que revelen profundidad intelectual o agilidad mental. De hecho, la admiración y respeto que despierta entre quienes escuchan embobados sus palabras me recuerdan al personaje Chauncey Gardiner, de la película "Being there" (versión en español: "Desde el jardín"), en la que un retrasado se hace famoso en la política norteamericana en base a sus expresiones jardinezcas que cada quien interpretaba crípticamente del modo que le pareciera más genial.

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9 comentarios:

  1. Ja ja ja, Ricardito en paños menores. Genial!!

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  2. Una cosa que no mencionas, es que Ricardo Lagos dejó botada a una mujer, a la cual tildó de loca. Además, separó a sus hijos de su madre.
    Lo puedes ver en el blog de Hernán Vasquez.Este es el blog: http://vasquezhernan.blogspot.com/search?q=Ricardo+Lagos+

    Omites una frase que siempre don Hermógenes Pérez de Arce se la saca en cara, y que es una cita su libro de economía que escribió en los 60: "Todas las unidades económicas deben pasar en manos del Estado".

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  3. Javier, aunque resalta la característica psicopática de Lagos (con episodios que dan para otro artículo), es interesante conocer los detalles de lo que pasó en su primer matrimonio.

    En cuanto a la frase que cita Hermógenes, está incluida en este artículo, copiada a la letra de su tesis (que no puede considerarse como un "libro de Economía"): "La única y verdadera solución es, entonces, la abolición de la propiedad privada de los medios de producción, los cuales deben pasar al Estado."

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  4. Leí demasiado rápido el artículo, que no dí cuenta. Gracias por haberme recordado. Me fije el tono doctoral de Lagos que muestras en el post.

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  5. Sr. Cárdenas, si bien son interesantes los detalles que cuenta sobre Lagos Escobar, personalmente creo que es perder el tiempo dedicarle un post más a este personaje. Creo que solo él piensa que alguna oportunidad tiene para volver a la presidencia, nunca podrá superar el desastre del transantiago, y los actos de corrupción en el MOP, que por cierto aún siguen abiertos. La concerta tuvo una pequeña virtud, a pesar de todo, pues sien esa pequeña virtud todo pudo ser peor, y es que la mitad de los ministros de hacienda fueron bastante competentes, me refiero a Foxley y Eizaguirre, por que tanto Aninat como el infumable Velasco, es mejor olvidarles. Y es sobre Eizaguirre, al que todos le debemos un agradecimiento por el asunto del jarrón del yerno Lagos (seré mal pensado, pero… me encantaría hacerle un arqueo de cuentas a la familia Lagos en pleno, y por ejemplo saber como pago la campaña Laguitos Weber), siendo ese episodio donde se retrata con toda claridad tanto la incompetencia como la ignorancia económica de Lagos. ¿Qué clase de irresponsable por cuidar el trasero de un familiar esta dispuesto a causar una corrida bancaria y dañara la “confianza económica” de un país? Solo un sujeto que vive de ínfulas y apariencias como Lagos.

    Sobre la relación de la masonería con Lagos, según recuerdo fue él quien le dio notoriedad al tema, y por eso, puedo deducir que era el típico político masón, ahora que cuando hablo “del típico político masón”, no trato de ofender a los masones, pues como un buen amigo masón me señaló, los políticos que ingresan a la logia, no pasan del 3 grado, …por que no les da para más, y mi amigo sabía de lo que hablaba, pues en es momento ya hacia años había alcanzado el grado con 2 dígitos. Y no digo el número, pues es privado, y los masones de grados superiores no ostentan su condición, siempre suelen hacerlos aquellos que no superaron los primeros niveles, como en el caso de Lagos, con obvias intenciones de estatus, pero para los viejos masones se aplica la norma alquímica, “el sabe no habla, y el que habla no sabe”, y seamos justos, a Lagos Escobar le encanta escucharse hablar.

    No me extiendo, por que aún estoy rumiando el enfado con un comentario de una estúpida “artista” en el Blog de Hermógenes.

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  6. Heitai, a lo mejor tienes razón y hablar de Lagos es un completo desperdicio.

    Pero, como en el caso de Allende y otros falsos "grandes de Chile", se han publicado demasiados panegíricos de una persona que es una completa estafa.

    Es lo que intento probar en este artículo.

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  7. Lagos cree que todo el que se le acerca le va a dar la mano. Es un poco narciso y delirante el sujeto.

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  8. No es desperdicio cuando el individuo quiere re-postularse. Lo vi hace un mes en Tolerancia Cero, rejuvenecido, arrogante sin un apice de arrepentimiento.

    El episodio de Doña Carmen, su desdichada ex-conyuge da para hablar y mucho. Incluso ese incensio tan extraño. Un poco antes de morir ella , un amigo mio tuvo una entrevista con Doña Carmen en la que le dijo cosas extraordinarias sobre la personalidad de su funesto ex marido.

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  9. Violante, espero que te recuperes pronto y quedes como tuna.

    No conozco los cargos de doña Carmen Weber a Lagos (los medios no las consignan en los registros en que busqué), pero por muy bipolar que haya sido no creo que haya mentido.

    De discretas luces y desprovisto de clase, Lagos fue (y sigue siendo) un completo arribista con una opinión psicopáticamente enaltecedora de sí mismo.

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