El hombre de los Castro en Uruguay, "nuestro" embajador Eduardo Contreras, se hizo un gran billete en la industria chilena de los derechos humanos, representando a castristas que les fue mal cuando enfrentaron con armas al gobierno militar.
El sujeto es parte de la cáfila que integra la plana mayor de la UP y buena parte de la judicatura actual que ha perseguido a quienes les dieron la fleta cuando intentaron por la fuerza recuperar el país para los Castro.
Visto que la productividad del negocio ha bajado considerablemente, Bachelet premió a este gallo con la embajada en Uruguay, donde nadie esperaba que hiciera algo que valiera la pena.
Por lo mismo, nadie debería sorprenderse de que ayer se hubiera mandado esta declaración: "no tengo ninguna duda de que estos actos terroristas que se han registrado son de la ultraderecha. Es lo mismo que hacían cuando estaba Allende, aunque usen elementos anarquistas".
El tenor de sus palabras es absolutamente compartido por toda la nomenclatura bacheletista, pero el horno no está todavía para bollos de esta magnitud y es bien probable que la Gordi deba prescindir de sus apreciados servicios.
Piñera se demoró minutos en sacar de su cargo a Miguel Otero, entonces embajador en Argentina, por haber declarado que la expulsión del gobierno castrista de Allende había sido celebrada por muchos chilenos, lo que pese a ser una verdad del porte de una catedral va contra lo que el catecismo zurdo difunde en todo el mundo. Y a esta altura todos sabemos dónde está el corazoncito de este pretendido líder "derechista".
El verdadero problema para la UP/DC, sin embargo, es cómo sacar a Contreras sin que los Castro les reclamen con reactivar la calle.
Pudiera ser que el vicioso de la foto salga de la embajada, pero no es menos seguro que otro castrista sería designado en el cargo.
Al final del día, no hay que olvidar que Bachelet es una castrista de tomo y lomo; y que el objetivo del gobierno de destruir el modelo es funcional a los intereses de La Habana, que es la que inspira la acción de La Moneda.
Pudiera ser que el vicioso de la foto salga de la embajada, pero no es menos seguro que otro castrista sería designado en el cargo.
Al final del día, no hay que olvidar que Bachelet es una castrista de tomo y lomo; y que el objetivo del gobierno de destruir el modelo es funcional a los intereses de La Habana, que es la que inspira la acción de La Moneda.
El problema es que este no es el unico mal embajador que tiene Chile en la actualidad. MUchos de los que hay se dedican solo a temas partidistas, o organizar los que votaran en el exterior, sin importarles el tema pais y la defensa de los intereses de Chile.
ResponderEliminarPor ejemplo, tenemos al Embajador en Argentina, donde tenemos problemas serios de comercio, integracion y lo pendiente con Campos de Hielos del Sur, que entra en una delicada fase de negociacion. Luego, el tema de los embajadores que no hablan los idiomas de los paises donde estan asignados, como el aso delel Sr.Drago, actualmente en Londres, que no habla ingles. Era el el llamado a contactar a la prensa que participo en el Chilean Day, con los resultados que ya conocemos ampliamente. Enfin, ejemplos de impericia y flojera hay muchos, y no es necesario circunscribirse al ejemplo en Uruguay.
Imagino que en Argentina todavía se preguntan qué cagada está quedando en Chile cuando les reemplazan al imponente y culto Milenko Skoknic por el enano flaite Marcelo Díaz. Todo un símbolo
EliminarNo pueden tapar el sol con el dedo, que son varias cosas.
ResponderEliminarTodos sabemos que los atentados en estos últimos cinco años son de la Izquierda y el del metro estación Escuela Militar fue propio gobierno de Bachelet.
Ahora entendemos ese 'Nuevo Ciclo', gracias al paskin inglés FT, quien dijo estamos en la Nueva Mediocridad.
La "revolución" está tan desacreditada que tuvieron que acuñar esa otra expresión: "nuevo ciclo"
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