lunes, 29 de octubre de 2012

Eficiencia sin épica. 1

La coalición de centro-derecha que en poco más de dos años ha exhibido la gestión de gobierno con mayor destreza y eficiencia de nuestra historia reciente, ha sido apaleada en las elecciones municipales.

Y lo más impresionante es que ha perdido frente a una coalición de centro-izquierda desacreditada tanto por sus vicios durante la administración pasada, como por el modo artero con que ha hecho oposición a este gobierno.

Pero, calma, hasta aquí no ha ocurrido nada cuya reparación tome muchos años ni esfuerzos enormes. Si la centro-izquierda hubiera vuelto a controlar el ejecutivo y consolidado sus mayorías parlamentarias, ahí sí que estaríamos en serios problemas porque el funcionamiento institucional se bloquearía, volviendo casi imposible la alternancia derecha-izquierda, que es el pálpito vital de una república libre (1).

Siendo entonces que esta instancia no tiene ese nivel de gravedad, como son las elecciones que vienen de aquí a un año, debe tomarse como una oportunidad de oro para aprender cuestiones que muchos creían dominar.

Ciertamente, la agilidad y seguridad con que este gobierno al asumir tomó sus primeras medidas de corte netamente político (proponer un gobierno "de unidad", declarar su admiración por los "logros" de la administración pasada, adoptar una agenda de realizaciones populistas, inhibirse de dar una imagen de autoridad y orden frente a las manifestaciones, o abstenerse de promover la aplicación de recta justicia en casos de juicios a militares, etc.), hacía pensar que sabía muy bien, que dominaba lo que estaba haciendo.

Considerando que la lectura obvia de esa política era que el gobierno adoptaba o al menos reconocía legitimidad a la épica de los opositores y que renunciaba a levantar una propia, de sentido contrario (que generara reacciones negativas en la centro-izquierda), en este blog compuse varios artículos dudando del efecto positivo de ella, cuestionamiento que se vio reflejado en las encuestas, pero que aún no se probaba con resultados electorales.

Ahora ha quedado claro. Esa política no produjo ninguna deserción en las filas contrarias pero sí mucha desilusión entre quienes eligieron y apoyan al gobierno. Al punto que mucha gente perdió el entusiasmo. Libres de la normativa compulsiva para votar, no fueron pocos los votantes que se encontraron sin razones para salir de su casa a dar su apoyo a un candidato cuya "causa" era anodina, sin fervor valórico, sin épica.

La simple revisión de los números así lo demuestra. Los centro-derechistas se quedaron en casa. La oposición ganó con lo mínimo: el compromiso y la movilización decidida de la minoría que les apoya. Increíblemente, cualquier dosis de un componente similar en la centro-derecha les habría significado una derrota descomunal.

Sin perder más tiempo en elucubraciones teóricas, lo que la centro-derecha debe hacer es reflotar su épica, sin importar que ella genere réplicas ni contestaciones desde la centro-izquierda. De hecho, ESE debió ser el objetivo desde el primer momento: sacar a la oposición al pizarrón, hacerla enfrentar su responsabilidad en la gigantesca corrupción pasada, en las malas prácticas que aún hoy siguen afectando la buena marcha del gobierno, en las erradas visiones anti familia, en la grave concomitancia con los regímenes dictatoriales y proto-dictatoriales del continente, en la pésima gestión de los conflictos vecinales, etc.

La negatividad legislativa y el combate a las iniciativas del gobierno debe ser EXPLOTADA por el gobierno, no eludida. Ella sirve para contrastar posturas y evidenciar el talante de unos y otros.

Ahora, el asunto de la épica constituye el desafío al interior de los conglomerados que lideran a los sectores pro libertad en Chile. Sin embargo, la postura de Sebastián Piñera y de sus cercanos no se ve proclive a este escenario ni tampoco se ve convincentemente identificada con los valores contrarios a los de la centro-izquierda. Los chilenos que mayoritariamente resolvieron alejar a la Concertación del poder se han visto sorprendidos por esta cuestión.

Siendo que el apoyo ajeno a las ideas propias supone, cuando menos, tener ideas propias, la primera dificultad en la centro-derecha es ponerse de acuerdo en cuáles son las que definitivamente les convocan. Porque a estas alturas es indiscutible que hacer un despliegue de eficiencia sin una épica que le de contexto y sentido a futuro no sirve para ganar elecciones ni mantenerse en el poder.

(1) Durante su gestión pasada de 20 años, la centro-izquierda alteró la institucionalidad (en la administración de justicia, en la creación de institucionalidad para la custodia de su épica, en la constitución de orgánica fiscal no dependiente del gobierno, en el financiamiento y articulación de ONGs, etc.), la conformación de los contingentes administrativos y de los medios de prensa haciéndolos funcionales a sus intereses de largo plazo. El presente gobierno no sólo ha sido incapaz de neutralizar esta red controlada por sus antecesores, ni siquiera la ha denunciado con la energía y claridad debidas.

Sigue la segunda parte de este artículo para revisar la épica.

12 comentarios:

  1. Cuanta razón! Gracias y felicitaciones.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Amigo, no me felicites que mi ánimo no está para celebrar. Me ayuda, eso sí, que comprendas y compartas lo que pasa. Con los aportes de cada uno superaremos esto.

      Eliminar
  2. No suelo estar de acuerdo contigo pero tienes razón en lo grueso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso es exactamente lo que debería pasar al interior de la centro-derecha. Es descaminado esperar que estén TODOS de acuerdo en TODO.

      Unas pocas ideas sencillas y formuladas con claridad son más que suficiente para generar la mística que se requiere.

      Gracias por tu comentario.

      Eliminar
  3. Mucha gente de nuestro sector no salió a votar por rechazo al actuar del Gobierno que abrazó las banderas de la Izquierda, hasta cometió traición hacia sus electores. El resultado los pagaron los alcaldes emblemáticos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estando de acuerdo en eso, espero que el gobierno enmiende su postura dando señales claras de que de verdad "escuchó". Los demás líderes del sector deben dar señales similares, hay varios de ellos definitivamente pasados por agua.

      Eliminar
  4. Yo no voté ayer, porque no me gusta el alcalde de mi comuna, Francisco de La Maza y se insiste en mantenerlo, pese al rechazo que genera. Estoy seguro que otro candidato de la misma coalición, sacaría aun más votos que este alcalde. Me decepciona la tozudez dentro de esta coalición y las constantes peleas entre los dos partidos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Comparto tu desazón. Esos círculos cerrados que se instalan en nuestras comunidades y que finalmente resultan ajenos aún para los propios partidarios son fruto del secuestro de los asuntos públicos locales por parte de la "clase política".

      Este artículo incluye una descripción de ese pernicioso efecto en nuestra república.

      Eliminar
  5. Ciro:

    Es preocupante el tema que escribes acá y que continuarás en otras dos partes (me anoto para que me lo envíes a mi mail por favor. Te mandaré uno al link que dejaste).

    Yo me siento más preocupado hace bastante rato con la nula explotación de las ideas de derecha en el gobierno, más han tratado de quedar bien y confrontarse poco con la centro - izquierda y la izquierda mas radical.

    En las elecciones pudimos notar la gran abstención de votantes, de los cuales conozco mucho a los que traté de inculcarles el Plan Ahora, ya que justamente su forma de castigo al ideal "derecha progresista" era NO votando.

    Espero que las elecciones les hagan recapacitar y comenzar a captar a su masa votante con la defensa real de las ideas de derecha y no de populismo.

    Saludos estimado!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Interesante lo que informas, que también coincide con mis experiencias cercanas. Confirma que la mayoría que se quedó en sus casas era simpatizante de la derecha. Estoy trabajando en ambos documentos, mi objetivo es contribuir a aclarar las ideas. Mientras tanto, recomiendo revisar este sitio.

      Eliminar
  6. la verdad es lo que expresas en realidad....estamos decepcionados de este Gobierno...
    yo me inscribi para votar y por ende debo cumplir con mi deber civico...aunque tenia super claro que por lo menos en maipu seguira el mismo ladron pero con otro apellido...la forma de comprar sus votos indicando que condonaria las deudas de basura...y muchas cosas mas....creo que el fracaso de las elecciones ayer fue la desmotivacion y decepcion del pais por lo que se dice ser "Derecha"...y para hablar de crecimiento pais solo se debe ver la pagina de CEpal

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La masa de votantes que no votó fue considerable... y casi toda de derecha. Razones para esa desidia sobran, el gobierno de Sebastián Piñera es capaz de desalentar al más entregado de los simpatizantes.

      Eliminar

Tu opinión enriquece nuestro trabajo. Gracias por comentar.