miércoles, 10 de noviembre de 2010

Pretensión peruana, un oportuno cambio en Chile

Los ataques al Presidente Sebastián Piñera por la anécdota en Alemania incluyeron descalificaciones por su manejo de las relaciones exteriores en estos pocos meses que lleva gobernando. Esas críticas me parecieron destempladas frente a los errores que en este campo cometió el progresismo local en 20 años (somera descripción en post anterior).

Dentro de esos errores incluí el manejo de la pretensión peruana sobre el mar frente a Arica y la Región de Tarapacá. Al respecto, Tomás Jocelyn-Holt afirma (en Twitter) que "en el caso (de) La Haya siempre se supuso que ésta era una veleidad de Alan García y que sería manejable con otro (Presidente sucesor). Pues bien [continúa], el tío ¡volvió! (y) lo único que se hizo con Perú desde (ese) día (fue) socializar la estrategia entre todos para que nadie (pudiera) quejarse cuando (viniera) el fallo".

Siendo que Jocelyn-Holt fue miembro oficialista del Congreso, debo suponer que está bien informado y que efectivamente su gobierno aplicó el mismo estilo con que se trató el litigio con Argentina por la Laguna del Desierto, durante el período de Aylwin: preparar a todos para lo peor.